La frustración de no tener la “vida perfecta” o que se cumplan nuestros deseos o metas, puede llevarnos a tener pensamientos suicidas (pensar en quitarnos la vida) o de muerte (desear la muerte).
A veces los hemos tenido durante tanto tiempo que ya no sabemos otra forma de lidiar con los eventos que nos entristecen o nos enojan. Entonces tenemos que enfrentar dos problemas: lo que nos hace sentir mal, y los pensamientos de muerte o suicidio.
Lo que te proponemos en DBT es poder aceptar la vida tal cual se presenta, no es colocarnos en una burbuja. Es poder fluir con la vida, zambullirnos en la vida tal cual se nos presenta, unirnos a ella con lo bueno y lo malo, con los fracasos y (algunos) éxitos.
¿Cómo?
Con Mindfulness para regular los niveles de ansiedad, poder experimentar una cosa a la vez y encontrar mi Mente Sabia.
Con acción opuesta, para poder hacer aquellas cosas que no quiero hacer, pero sé que son saludables para mí.
Con efectividad interpersonal para poder expresarme los más claramente para lograr mis objetivos.
Con aceptación radical para poder aceptar lo que no puedo cambiar.
Haciendo “limonada de los limones”, ejemplos:
- No se cumplió una meta: busca otra.
- Me dejó mi pareja: disfruta la soledad, todo es transitorio.
- Falleció un ser querido: valídate el dolor. Es normal extrañarlo mucho hasta que parece que duele, pero luego de un tiempo, ese sentimiento de dolor se va a ir transformando hasta poder recordar con Paz la persona que se fue.
- Siento que no puedo solo: busca ayuda. Un amigo, terapeuta, médico, religión.
A veces es necesaria la ayuda de la medicación psiquiátrica que permite regular alteraciones neuroquímicas que se han generado con los eventos adversos y la vulnerabilidad personal.
Y siempre es necesaria la psicoterapia. Ese tratamiento que produce cambios en la configuración cerebral de manera tal que los síntomas remiten. La Terapia Dialéctico Comportamental ha demostrado ser eficaz en esa área, controlando la ideación suicida/muerte y de esa manera lograr una “vida que merezca de ser vivida” (Dra. Marsha Linehan).
¡Cambiar el posible!!!
Dra. Gabriela López Rega.
Dra. Verónica Santos Spagnuolo.